Retrato de Jennie

Un pintor, empobrecido, debilitado y lleno de dudas, encuentra en Central Park a una niña que decide acompañarlo en su marcha. La niña está sola, y parece satisfecha. Le canta una canción y luego pide un deseo: que la espere hasta que crezca. Invadido por una extraña sensación, el pintor vuelve a casa y en su cabeza murmura la canción de la niña, su extraña vestimenta y su seguridad misteriosa. El encuentro con una nueva idea, un pensamiento rumiante. Con ilustraciones cargadas de la neblina y solitaria ciudad, este libro entra y sale de las pinturas y los encuentros anacrónicos de sus personajes, en un ritmo lento y sereno, aunque cargado de angustias. Los encuentros entre el pintor y la chica, que va creciendo a medida que el protagonista avanza en su propia vida, se aprecian como un espejeo de la propia alma, a la vez que encarnan una historia de amor e imágenes imposibles de soltar.