El hombre invisible

Una tarde de enero, muerto de frío, un hombre misterioso pide a gritos una habitación y un fuego. La anfitriona, sorprendida de recibir un huésped en esa época del año, lo atiende diligente. Pero pronto se dará cuenta, así como el resto del pueblo, que el hombre no solo es un misterio, sino de un trato muy amargo también. Con la cara completamente vendada, cubierto de pies a cabeza, y la habitación llena de botellitas e instrumentos de experimentación, la gente del sector irá construyendo a su alrededor extrañas teorías, cuál de ellas más extravagantes, para explicar los extraños sucesos que envuelven al viajero. Brujería, deformidades, un accidente, nada parece dar respuesta a su extraña conducta, y ciertas características de su anatomía que un ojo acostumbrado a lo habitual no termina de entender. Wells, apegado como era a la ciencia, establece con este relato un precedente para lo que sería en el futuro, y lo que es hoy, las bases de la ciencia ficción, sin dejar de lado una pluma virtuosa en cuanto a literatura. Ilustrado con suficiente enrarecimiento y oscuridad, esta edición es un lujo para quienes dan sus primeros pasos en el camino de la lectura inquietante.